Esta tarde ha quedado inaugurada la rehabilitación y restauración de la primitiva Fuente de la Cuerna y su aljibe, tal y como se describe en los dictámenes inventariados de 1671 por el juez Manuel Carballo Viegas.

A este acto ha asistido el arquitecto y director de las actuaciones realizadas, Alberto Méndez y el alcalde de Olivenza, Manuel J. González Andrade, además de miembros de la Corporación Municipal y numerosos oliventinos que no se han querido perder este momento histórico.

González Andrade ha descrito este aljibe como uno de los tesoros más ocultos de Olivenza, que ve la luz para los oliventinos de hoy, y que debemos de cuidarla y preservarla para que la disfruten los oliventinos del mañana.

El alcalde ha resaltado que esta es una apuesta más por la recuperación del patrimonio oliventino, como también lo fue la puesta en valor de los grafitos medievales de Torre del Homenaje, la restauración de los altares mayores de la Magdalena y de Santa María del Castillo o la rehabilitación de la Puerta del Calvario, ente otros.

En este sentido, de apuesta por recuperación de patrimonio, el primer edil oliventino ha anunciado la puesta en marcha de un Centro de Interpretación para recordar el pasado Judío de Olivenza o la rehabilitación de la Fuente de la Rala, entre otros.

Una apuesta por la historia, por la cultura, por el turismo, un atractivo más para visitar la ciudad, una apuesta por el pasado y por el futuro, un potencial al que no debemos renunciar, ha dicho el alcalde.

Por su parte, el director del proyecto ha realizado una introducción histórica de la primitiva fuente, enterrada en 1899, y de los recursos hídricos de Olivenza y ha repasado los trabajos de reconstrucción realizados durante la obra, además de la restauración y rehabilitación del propio aljibe.

La Fuente de la Cuerna se ha devuelto a su configuración primitiva, según los dictámenes del juez Vieras, con las limitaciones de la situación urbana actual, donde se ha construido una escalera con dos tramos de mármol portugués, una fachada compuesta de un portal de arco, sobre él un muro con las armas de Portugal en piedra y remates piramidales a cada lado que hacen de fachada a la fuente. En la parte baja se sitúan dos bancos de azulejerías con descripciones de motivos iconográficos de escenas cotidianas de la antigua fuente; ya en el interior, tras la cristalera de seguridad, se observa un tanque de agua tallado en mármol de más de tres metros de profundidad y un túnel canalizado que depositaba en un antiguo lago y que ahora finaliza en la fuente de la Cuerna de los años 70.

La Fuente Aljibe se localiza en el subsuelo del acerado del Paseo de Tolosa, concretamente frente a la salida de vehículos del inmueble situado en el número 10, a unos 20m, en dirección suroeste, de la salida de agua de la fuente de la Cuerna por los caños y lavaderos de la década de los 70.

Las actuaciones realizadas han contado con la financiación de la anterior Consejería de Agricultura, Desarrollo Rural, Población y Territorio de la Junta de Extremadura a través de los fondos para el mantenimiento, recuperación y rehabilitación del patrimonio rural.