En total el ayuntamiento ha comprado 44 medidores, para cuatro centros educativos de primaria y secundaria
Esta mañana se ha hecho entrega, a los centros educativos de Olivenza, de 44 medidores de Dióxido de Carbono (cO2) adquiridos por el Ayuntamiento para controlar la concentración y saturación de cO2 en las aulas.
En concreto, los Centro de Primaria y Secundaria, Escuelas Parroquiales del Sagrado Corazón, Colegio de Educación Infantil y Primaria “Francisco Ortiz López” de Olivenza, Colegio Rural Agrupado “La Raya” e Instituto de Educación Secundaria Obligatoria “Puente Ayuda”, han recibido de manos del Ayuntamientos los controladores de los gases, también conocidos como anhídrido carbónico.
La directora de las Escuelas Parroquiales, Marian Benito, ha percibido los 12 aparatos de registro de co2, de manos de trabajadores del consistorio oliventino.
Marian ha agradecido a la institución municipal, “el compromiso que siempre ha mostrado con nuestro centro”.
Por su parte el director del C.E.I.P. “Francisco Ortiz López”, Emilio Sández Álvaro, ha resaltado la eficacia de estos dispositivos, “nosotros ya contamos con varios medidores en nuestro centro, y se ha demostrado que con mayor ventilación la reducción de partículas de co2, disminuye considerablemente”.
Sández ha añadido que, “con estos 16 equipos aumentaremos, más si cabe, nuestra protección y por tanto reducimos la posibilidad de contagios”.
El C.R.A. “La Raya” que ha recibido 4 medidores de co2. Su director, Fernando Ruiz Calderón, ha señalado que “serán colocados en las diferentes aulas de las pedanías oliventinas, para que nuestro alumnado y sus familiares estén más seguros.”
Luis Francisco Sánchez, director del I.E.S. “Puente Ayuda”, se ha mostrado satisfecho por, “recibir instrumentos que mejoren nuestro compromiso y protocolos contra la Covid-19”.
Todos los centros educativos están siguiendo los estrictos protocolos de seguridad Covid-19, marcada por la Consejería de Educación y Empleo de la Junta de Extremadura, ventilación de aulas, entradas y salidas escalonas a los centros educativos, uso de mascarilla obligatoria, distancia interpersonal, lavado continuo de manos, geles hidroalcohólicos, entre otras.
Los medidores de CO2 son pequeños aparatos, sencillos, manejables y muy claros tanto para profesores como para alumnos de todas las edades.
El medidor se coloca en el aula en un punto donde los propios estudiantes puedan comprobar la calidad del aire en cada momento y alertar si la situación se complica.
El controlador numérico va cambiando de color según la cantidad de CO2 en el ambiente, hasta 800 en verde, está bien, de 800 a 1.000 en amarillo, precaución y a partir de 1000 está en rojo y hay que ventilar o salir del aula.